Cabeza de familia: aunque no pegues, ¡pagas!
“Pasaba una procesión de Semana Santa. Habías invitado a tus amigos. Uno de los niños tiró, sin querer, una maceta que rompió uno de los pasos, rebotó e hirió a un cofrade en la cabeza”. “Tu hijo se fue de Erasmus a Polonia. Un día, yendo a clase con la bici golpeó a un peatón…