El escritor Giovanni Papini le dijo a Henry Ford en lo alto del Empire State: “Parece mentira que los hombres hayan sido capaces de construir todo esto”.
A lo cual le contestó Ford: “Esta ciudad no la han hecho los hombres. La han hecho los seguros”.
Ante la cara de incredulidad de Papini, Ford agregó…
“Sin los seguros no tendríamos rascacielos, porque ningún hombre se atrevería a trabajar a esas alturas, a riesgo de matarse y dejar en la miseria a su familia. Sin seguros ningún empresario invertiría sus millones en construir un edificio como éste, que una simple chispa puede reducir a cenizas. Sin seguro nadie circularía por estas calles, sabiendo que en cualquier momento puede tener un accidente. Y esto no sólo ocurre en Estados Unidos. Es el mundo entero el que descansa sobre la base de los seguros. Sin ellos, cada hombre guardaría su dinero sin invertirlo en ninguna parte por temor a perderlo, y la civilización se habría paralizado poco menos que en la barbarie”.
Cuando hablamos de seguridad en una empresa, nuestras mentes se dirigen hacia los equipos de protección individual y por supuesto hacia los sistemas de seguridad y protección instalados en la empresa. Sin embargo, aún evitando y minorizando todos estos riesgos la mala suerte se puede cebar con una empresa y hundirla, a pesar de ser exitosa. Y ante esta situación, ¿qué hacer?: un Seguro para la Empresa es la solución ante casi cualquier contingencia que pueda acontecer.
En un principio se trata de unos seguros complejos, pero queremos resumirlos muy brevemente:
Seguros Patrimoniales: Afectan a los activos materiales e inmateriales; los inmuebles e instalaciones fijas, mobiliario, la maquinaria y los equipos electrónicos, las materias primas y las existencias y los vehículos de la empresa.
Seguros para Personas: Afectan a las personas, son los riesgos empresariales con relación al equipo humano que conforma la empresa; como los convenios colectivos, accidentes colectivos, vida, asistencia en viaje, secuestro y extorsión, entre otros.
Seguros de Responsabilidad: Es el riesgo al que se enfrenta tu empresa cuando le puedan exigir el pago de una indemnización a causa de los daños o perjuicios que haya ocasionado a un tercero o al medio ambiente.
Seguros de Resultados: Son aquellos que afectan a los resultados de gestión de tu empresa, derivados de la posible paralización de la actividad por accidente o siniestro grave y de los posibles impagos de las ventas que se realizan a crédito.